— De pequeños jugábamos más mezclados. Pero de mayores sí lo recuerdo. Los niños jugaban y nosotras mirábamos desde los bordes (Andrea, 29 años)
— ¿Todavía pasa esto? En mi colegio no había un muro, pero era como si lo hubiera, una especie de línea divisoria. No podías pasar de ahí. Los niños ocupaban dos de las tres partes y las niñas, en todo caso, mirábamos (Carmen, 61 años)
— Yo me acuerdo que cruzar la pista daba incluso un poco de miedo por si te daban un pelotazo. Era un terreno como muy hostil (Víctor, 27 años)
Preme nas fotos para ler diferentes informacións.
No hay comentarios:
Publicar un comentario